«El CUD en su laberinto» por Marcelo Langieri
23 octubre, 2018
Opinión (Página 12)
La instalación de la UBA en el encierro de la cárcel hace más de 30 años fue posible por la energía puesta por la universidad y por la situación de repliegue que vivía el Servicio Penitenciario Federal a la salida de la dictadura. El Programa UBA XXII tuvo su inicio en la cárcel de Devoto con la carrera de Abogacía y fue incorporando a las carreras de Sociología, Psicología, Contador público, Administración de empresas, Letras y un Laboratorio de computación dictado por la Facultad de Ciencias Exactas. Además de numerosos talleres.
Fuente: Pagina 12