FILOSOFÍA
Cátedra: ROSSI
Descripción de la materia:
Teniendo en cuenta los contenidos mínimos dispuestos por el Plan de Estudios de la Carrera de Sociología, la asignatura Filosofía propone un programa diacrónico (histórico-genético) que articula textos clave pertenecientes al pensamiento filosófico moderno y contemporáneo en sus enlaces con el pensamiento clásico. Asimismo, repone en un plano sincrónico (formal-conceptual) las principales categorías que habilitan la comprensión del mundo histórico-social y su transformación.
En esta oportunidad, los ejes sincrónicos articularan por un lado la cuestión de la palabra, la conversación, el logos y la phoné, la amistad y el compromiso ético-político. Por el otro, versarán en torno de la cuestión de la libertad y la dominación, tanto de la naturaleza como del humano en tanto otro.
Desde una perspectiva hermenéutica que estimula el diálogo crítico y la apropiación situada de las corrientes aludidas, anclamos los conceptos surgidos en el seno de esas tradiciones a la realidad efectiva de nuestras comunidades latinoamericanas y a sus problemáticas específicas. De ahí que en cada unidad se establezca un contrapunto entre los clásicos y las lecturas contemporáneas que, desde un compromiso teórico-emancipatorio, se han llevado a cabo en América.
En tal sentido, el énfasis de la materia está puesto en el texto como matriz productiva de sentidos y en la figura del lector, cuyo rol es cardinal para la construcción de significado/s. En tal sentido sostenemos que más que enseñar contenidos, guiamos en la aventura de leer. Consideramos que les estudiantes son parte activa de ese mundo de lectores, capaces de revitalizar los textos y de construir nuevas constelaciones conceptuales a partir de su ubicación concreta en un entramado histórico-social. La escritura es parte fundamental de esa construcción, al igual que el desarrollo de las dimensiones sensible y afectiva, no inferiores a la cognitiva. De ahí que se introduzca material fílmico en algunas de las unidades a trabajar. La incorporación al programa de estas dimensiones es parte del proceso de deconstrucción de las jerarquías implícitas en la metafísica de Occidente.
Conforme con una hermenéutica dialógica y crítica, se propicia el diálogo entre interlocutores que no necesariamente pertenecen a una misma época ni a un mismo “mundo”: los “clásicos” son así interrogados por lectoras y lectores pertenecientes a 2 universos histórico-sociales contemporáneos, tornando vigentes sus problemáticas e integrándolas a un locus y a un ethos propios.
Se establecen asimismo intercambios fecundos de la Filosofía con los puntos de vista propios de la Sociología, en la convicción de que el entramado interdisciplinar enriquece las perspectivas de ambos campos teóricos. Si bien se reserva la última unidad al estudio de la Filosofía Latinoamericana a fin de visualizar mejor su originalidad, a lo largo de cada una de las unidades se proponen lectores que llevan a cabo una apropiación singular de las filosofías nacidas en suelo europeo. De este modo, se construyen constelaciones abiertas de sentido que derrotan la historia vista en modo lineal, a la vez que se propicia un contrapunto polemizante entre diferentes perspectivas, algunas convergentes, otras en conflicto. El pensamiento filosófico contemporáneo es presentado así en continuidad y ruptura con los presupuestos del pensamiento moderno y se abre al punto de vista latinoamericano, atendiendo a sus formas específicas de vincularidad colectiva, a sus tramas sensibles y a sus luchas emancipatorias. El anudamiento de la problemática del género, y el énfasis puesto en la filósofa mujer como lectora y productora de sentidos, da cuenta de la perentoriedad de la incorporación de estos temas a los programas de estudios en todos los niveles de la Educación Superior y en particular en las Ciencias Sociales.